El arroyo de San Vicente y otras esguevillas
El título de esta entrada bien podría haber sido: ¡Intuye Esguevillas!, ¡ Por ahí debe de estar el Cerrato! O algo parecido, para ello hubiera bastado salir al día anterior o el siguiente. Entre días de niebla cerrada, nos encontró uno soleado que nos ha permitido, de nuevo y en bicicleta, asomarnos a un luminoso...